Capítulo 2. La casa del embajador
Las últimas semanas fueron duras para nuestros aventureros, después de partir de Nakuro con relativa presteza: digamos que se llevaron algún recuerdo bastante interesante. Abandonaron el Imperio Mida en busca de nuevos desafíos y mejores amistades. El territorio Mida era un territorio que cubría una gran parte del mundo civilizado y abandonar sus fronteras no era algo baladí. Los primeros problemas llegaron durante la primera semana. Buroko, el hipótido paladín que había actuado en los desastres de Nakuro los había abandonado. No dio explicaciones ni despedidas, aunque sin duda sus sospechosos motivos serían descubiertos en otro momento de nuestra historia. Después de varios días de duros viajes consiguieron avanzar lo suficiente hasta los límites occidentales del Imperio Mida. A pesar de que habían sido veloces en su huida parecía que el Imperio Mida estaba al corriente de lo que había ocurrido en Nakuro y se habían intensificado los problemas para abandonar las fronteras de...